Lo hemos conseguido... ¡hemos resuelto nuestra gran duda gracias a la ayuda de algunos amigos y familiares!
Ya sabemos que los peces respiran por las branquias, pero nos quedaba algo importante... ¡verlas! Así que para hacerlo nos hemos ido al lugar donde hay más peces: a la PESCADERÍA.
Allí Tomás, el experto pescadero, muy amablemente nos ha enseñado las branquias de algunos peces, como las sardinas, y a cambio nosotros le hemos contado que el otro día aprendimos que las ballenas no respiran por las branquias, sino que tienen pulmones y cogen el aire por un agujerito que tienen arriba, llamado "espiráculo".Ya podemos decir que ahora, !nosotros también somo expertos!...
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